“Lo primero que pensé cuando llegamos aquí hoy fue: 'Vamos a poder comer una ensalada esta noche con la cena'. Una ensalada real, saludable y abundante. ¡No puedo esperar!” -Robert
Robert y su esposa, Marie, se mudaron recientemente a Fallon. Robert quedó discapacitado hace cuatro años, y al año siguiente, Marie tuvo que jubilarse antes de lo previsto debido a una enfermedad. Ahora, la pareja vive con un ingreso fijo y lucha por llegar a fin de mes.
Robert nos cuenta que, casi todos los meses, él y Marie se sienten afortunados si les quedan unos $300 para gastar en comida después de cubrir sus otros gastos. No es mucho, pero se las arreglan comprando ofertas y pensando bien qué productos eligen. Esto significa que comen muchos más productos enlatados que antes, y Robert dice que a menudo se maravillan de lo mucho que una persona puede extrañar los productos frescos.
“Hemos trabajado muy duro toda nuestra vida. Es muy difícil sentir que nos hemos convertido en 'esas' personas mayores: o tomas tu medicamento o te alimentas. No pueden ser ambas cosas. Simplemente nunca pensé que eso nos pasaría”. -Marie
Recientemente, el médico de Robert le recetó algunos medicamentos nuevos de mantenimiento, y los copagos de los mismos han supuesto un gran golpe para el presupuesto mensual de la pareja. De repente, se encontraron en la situación de tener que decidir si dejaban de surtir las recetas o se quedaban con aún menos dinero para comprar alimentos cada mes. Fue entonces cuando un vecino le preguntó a Marie si conocían el programa Mobile Harvest del Food Bank, y decidieron echarle un vistazo la próxima vez que el programa estuviera en Fallon. Mientras los voluntarios cargaban sus compras en su vehículo, Robert y Marie se sintieron abrumados por la emoción.
“Recibimos tantos productos frescos que me asombra solo con mirarlos. También había huevos, leche y algo de carne. Gran parte de eso es lo que sentimos que tenemos que evitar en la tienda para estirar nuestros dólares, así que esto definitivamente se siente como un verdadero placer. Siento que muchas de mis preocupaciones simplemente se borraron. Saber que puedo obtener los medicamentos que necesito, y mi esposa y yo podemos volver a comer comidas saludables y nutritivas significa mucho. ¡Gracias!” -Robert
